Las mejores bicicletas para el Camino de Santiago
Hacer el Camino de Santiago puede proporcionarte muchas opciones, y una de las más famosas es la de realizar la peregrinación en bicicleta. Los precios de las bicis pueden variar desde los 500 euros hasta los 4000 euros, esta diferencia de precios puede ser vital en la calidad de nuestra bicicleta y las dificultades que esta nos de durante el camino debido a su calidad. Por eso queremos recomendarte algunas de las mejores bicicletas para el camino de Santiago y algunos consejos que te pueden ser útiles.
Descubre algunas bicicletas para completar el Camino
¿Cuál es el equipaje del peregrino cuando vamos en bicicleta?
En la página principal de nuestra web te hemos hablado del equipaje mínimo que debe llevar un peregrino para hacer el Camino de Santiago. Sin embargo, si estás pensando en hacer la ruta en bici, quizá debas tener en cuenta estos consejos específicos. En primer lugar, queremos tranquilizarte, porqué está más que comprobado, que con las alforjas bici hay espacio más que de sobra. No te recomendamos llevar una mochila a la espalda (a no ser que sea simplemente para llevar agua o documentación personal). Aunque vayas sobre ruedas, tal y como te hemos comentado antes, el peso se nota, sobre todo al final de la aventura. Llevar poco peso implica tener unas rutinas muy marcadas, como hacer una pequeña “colada” al llegar a cada destino, y tenderla con la finalidad de tener esa ropa seca al día siguiente. De esta forma ya estarás ahorrando muchas prendas.
Mientras pedaleas!
Lógicamente hay algunas prendas fijas que debes usar durante el transcurso de cada etapa. Y aunque es algo muy personal, el haber hecho el Camino en varias ocasiones y el haber hablado con muchos otros peregrinos, nos permite hacer una lista bastante completa:
- En este punto debes llevar el calzado adecuado. Si llevas enganches en la bici, utiliza unas zapatillas de bici que te permitan también caminar, son lo más recomendable. Sino llevas enganches, lo ideal es un calzado adecuado a la época del año.
- 1 culote (largo para invierno y corto para verano). Si lo lavas cada llegada, con uno tendrás suficiente. El culote es una prenda básica ya que te ayudará a sobre llevar las horas en la bici. Procura que sea con buen acolchado.
- 2 maillots (largos en invierno y cortos en verano). Es interesante llevar un par, por si quieres cambiarlo a mitad de la etapa (nunca se sabe el calor que puede hacer). Y quizá, después de una parada a comer te apetezca uno seco para reanudar el viaje. Además, ocupan muy poco espacio.
- 1 impermeable (nunca se sabe si va a llover) y forro polar (dependiendo de la estación del año).
- Llevar guante evita el frio en invierno, pero sobre todo evita ampollas y molestas rozaduras en las manos en caso de caída.
- Calcetines (finos en verano y más gruesos en invierno)
- Totalmente obligatorio.
- Gafas de sol.
Cuando hayas llegado!
Llegar a tu destino en cada etapa es una maravilla. En primer lugar, te acercas más al objetivo de cumplir la ruta de peregrinaje. Es, además, el momento del reposo del guerrero, y la hora de contar las anécdotas del día. Para que sea lo más relajado posible, recuerda tener a mano:
- Chanclas o zapato super cómodo y aireado. Incluso en la bici, los pies son los que más sufren.
- 1 toalla de paño. Lo más fina posible.
- 1 camiseta, 1 muda, 1 calcetines, 1 pantalón. Después de la ducha es muy importante poder tener ropa limpia. (En este sentido baraja la opción de llevar 2 de cada, por si acaso).
- Depende la época del año, es recomendable llevar 1 jersey, 1 bañador, 1 pantalón largo.
- Esterilla y saco. Aunque vaya de albergues, en ocasiones se agradecerá tener una esterilla y un saco de dormir propio.
- El aseo es básico, después de muchas horas en la bici el cuerpo se resiente y una buena ducha y una buena higiene son obligadas.
- Linterna, navaja, botiquín. Cada persona es diferente, pero hay cosas que nunca está de más tener a mano.
- Información del camino. Lo mejor de acabar una jornada es planificar la siguiente con los compañeros.
¿Y para tu bici?
Hacer el camino en bici implica que tienes una compañera de viaje a la que debes cuidar mejor que a ti mismo. Por eso hay algunos objetos básicos que no debes dejar de lado sino quieres tener un disgusto.- Cámaras de repuesto.
- Kit de pinchazos.
- Bomba de aire (que funcione bien).
- Aceite lubricante.
- Herramientas varias.
- Bridas.
- GPS.
- Porta bidones.
- Candado.
- Luces.
Consejos para hacer el Camino en bicicleta
El Camino de Santiago, originariamente, se hacía a pie o a caballo, como ruta de peregrinación a la tumba de Santiago Apostol. Hoy en día hay una nueva forma de hacerlo, se trata de la bicicleta.
Tipo de bici:
Lo primero es decidir si recorrerás el Camino en bicicleta de montaña, bicicleta de carretera o en una bicicleta híbrida. Para tomar esta elección, analiza los perfiles de las etapas que componen tu ruta y elige la bicicleta que mejor se ajuste a la ruta.
Forma física:
Son distancias muy largas (mínimo 200 km), lo que implica tener cierto fondo físico y algo de experiencia sobre la bici y pedaleando varias horas seguidas. No es que el camino sea complicado (a nivel técnico), pero si puede llegar a ser muy duro.
Planifica bien:
Nadie mejor que uno mismo para saber que alcance tiene su fondo físico. Planifica según tus capacidades o el camino será un suplicio. Elige los albergues, las paradas, y todo lo que implique que la ruta sea placentera. Cuando llegues cansado no te gustarán las sorpresas.
Equipaje:
Ya te hemos dado algunas recomendaciones. Lo más importante es analizar el tiempo que va a hacer durante la ruta, con el objetivo de no tener nada extra. En el Camino de Santiago, los “por si acaso” no valen. Más que para acumular peso, tu gran enemigo.
Cada etapa:
Equivocarse de camino puede ser desalentador. Así que ten muy clara la ruta, llévala a mano para consultarla. Hoy en día, la tecnología facilita mucho la opción de llevar un GPS, así que busca la ruta, bájate el track y solo tendrás que preocuparte de pedalear (que no es poco).
Credencial del peregrino y la Compostelana:
Con la Credencial podrás usar todos los albergues y será lo que te identifique como peregrino, séllala en cada punto de control y obtendrás la Compostelana, el certificado que se entrega a la llegada a Santiago una vez terminado el Camino.