Por que se debe hacer el camino de Santiago con perro
El Camino de Santiago es un viaje extraordinario, una forma de vida, en la que puedes disfrutar de tu soledad mientras cuentas en todo momento con la mejor compañía durante la peregrinación Y ninguna es mejor compañia que la de tu mejor amigo, tu perro. Por esto mismo, mucha gente se pregunta si se puede hacer el camino de Santiago con perro.
Si estás pensando en llevártelo contigo, aquí tienes algunos buenos consejos para que tanto peregrinos como perritos puedan disfrutar de la experiencia y estrechar aún más el vínculo entre vosotros.
¿Cuál es la mejor manera de hacer el camino de santiago con un perro?
Si vamos a vivir esta experiencia con nuestra mascota, conviene asegurarnos antes de empezar de que disponemos de un refugio o alojamiento donde podamos pernoctar para que nuestro perro nos acompañe y no tenga que dormir a la intemperie.
Por lo tanto, las mejores rutas a Santiago para hacer con tu perro son la francesa o incluso la portuguesa, ya que son las que cuentan con más servicios, por lo que no deberías de tener problemas para encontrar un alojamiento que acepte mascotas.
No obstante, siempre es recomendable que estudies tu camino con antelación con alguna guía o por internet, y que te marques todos los albergues amistosos con las mascotas. De esta manera, viajaras con la confianza de que tu mascota estará siempre con usted, recibiendo la atención que ambos se merecen.
Sea cual sea el camino que elijas, te recomendamos que no haga más de 120 km en total, ya que caminar distancias tan largas puede ser excesivo para tu perro. Esta distancia es la suficiente para poder obtener la Compostela sin problemas, ya que la distancia mínima a recorrer a pie es de 100 km. Tu perro podría dañarse las plantas de los pies tras andar tantos kilometros. Se puede hacer el camino de Santiago con perro, pero con precaución para tu mascota.
Cuando se trata de la época del año, también recomendamos primavera y otoño, ya que las temperaturas serán más suaves para evitar que tu perro pase mucho frío o esté expuesto a altas temperaturas en los meses más calurosos del verano.
La preparación física de tu perro
De la misma forma que tú, como peregrino, necesitas prepararte para el viaje que te espera en el Camino de Santiago, tu perro debe estar preparado y ser capaz de vivir esta experiencia.
Por eso, es conveniente que te acompañe en los entrenamientos en los días previos, para que él también se acostumbre a las largas caminatas por cualquier terreno. El objetivo principal es hacer que tu mascota se endurezca y prepare las almohadillas de sus patas para el camino, así que no te limites a caminos suaves o de tierra.
También puedes comprar «zapatos» especiales para mascotas, aunque dependerá de lo bien que se acostumbre tu perro a este tipo de complemento (sabemos por experiencia que no siempre se adaptan a ellos con la facilidad que nos gustaría).
Puedes dividir las caminatas de entrenamiento en dos partes, si no tiene tiempo para dedicarle muchas horas, dando una caminata larga por la mañana y nuevamente otra por la tarde. Caminar 15-20 km debería ser suficiente.
También es muy importante tratar correctamente la alimentación y limpieza de tu mascota. Tenga en cuenta que algunos gusanos tardan varios días en hacer efecto, pero duran varios meses. No olvides ponerle un collar anti pulgas y repelente de mosquitos: así evitarás las picaduras que pueden transmitir la leishmaniasis a tu mascota.
Qué llevar en una mochila para tu perro
Si vas al Camino de Santiago con tu perro, reserva un lugar en tu mochila para sus accesorios y asegúrate de que no se quede sin nada y pueda seguirte fácilmente por el camino.
Estas son algunas de las cosas básicas que no deben faltar en el cuidado de tu mascota durante una peregrinación:
Documentación
De la misma forma que llevas tu DNI o pasaporte y tarjeta sanitaria, tu perro debe tener al menos su propio pasaporte, en el que conste los datos de su microchip y las vacunas recibidas. También puedes llevar tu propia credencial correspondiente a tu credencial de peregrino.
Tenga en cuenta que las vacunas obligatorias pueden diferir según la Comunidad Autónoma en España, así como entre las razas consideradas potencialmente peligrosas.
Si tienes intención de hacer la etapa del Camino con tu perro en otra Comunidad Autónoma o país, asegúrate de hacerlo tomando las medidas oportunas y obligatorias (vacunas, bozal, seguro de responsabilidad civil, etc.).
Cordón reflectante y collar o arnés
Muchos peregrinos que hacen el Camino con sus perros prefieren comenzar antes sus etapas para evitar las horas de más calor para sus mascotas.
Sobre todo en aquellas horas del día en las que es menos visible, es buena idea llevar un perro atado y visible para que una buena correa y arnés o collar con reflectores le permita caminar seguro.
Crema para almohadillas o vaselina
Además de ser una buena arma contra las ampollas del peregrino, la vaselina te resultará muy útil para mantener bien cuidadas las almohadas de tu perro durante la noche.
También puedes optar por una crema de cuidado especial para evitar grietas y dolores.
Alimentos y bebidas
Además de su comida favorita durante el Camino, necesitas mantenerlo bien hidratado a tu mascota. Los bebederos plegables te serán de gran utilidad, ya que ocupan poco espacio en la mochila y podrás sacarlos en cualquier momento.
También te recomendamos que lleves premios para tu perro o galletas: tu mejor amigo se lo merece acompañándote en un largo día de paseo.
Cuidando al perro en el camino
En cada etapa, es importante que prestemos atención a nuestra mascota, para que nos acompañe durante el Camino sin complicaciones. Revisa sus piernas con frecuencia para ver si hay heridas en las almohadillas y que pueda seguir la ruta sin problemas.
Asegúrate de mantener a tu perro atado, especialmente en tramos de carretera, pero también entre ciudades. Durante las paradas o en algunas zonas verdes, se puede soltar fácilmente para que siga a su ritmo y se suelte un rato.
Además de los descansos necesarios para refrescarle y rehidratarle, asegúrese de prestar atención a su dieta. No es recomendable darle de comer justo antes de empezar a caminar, ya que puede hacerle sentir mal, pero puedes darle una golosina o un tentempié a lo largo del día para ayudarlo a recuperarse. En cualquier tienda especializada o clínica veterinaria podrán aconsejarte sobre este tipo de complementos, que contienen vitaminas y otros ingredientes muy beneficiosos para tu mascota.
Si el perro es pequeño, algunos tramos del camino podrás llevarlo en un transportin o en una mochila especial para perros, puede que por su tamaño no aguante todo el camino andando.
Al final del día, déjalo descansar y dale un buen plato de comida. En esta aventura, podrías considerar usar comida húmeda en lugar de comida seca normal: este tipo de comida contiene muchos nutrientes además de agua, lo que te ayudará a mantenerle hidratado como se debe.